domingo, 24 de abril de 2011

Columna 131: El año nuevo 1982


Albricias, Cisneros, viva el año nuevo. Habrá paz y prosperidad en las tarjetas que intercambiamos, en los telefonemas y en los cables, aunque haya mucha pena y arto remordimiento en las conciencias. Pero aquí estamos festejando. Que viva y que viva el aborto y la pobreza, que viva y que viva el narcotráfico y los minusválidos, que viva y que viva la inmoralidad administrativa. Viva todo eso, Cisneros; alégrese y déjese de argumentos tontos que a nada conducen. Viva la santa república del sol y del incario. Y viva el porvenir y la marginal, y el Perú todo con sus analfabetos y sus muertos de hambre, sus chicos desnutridos y sus infatigables oradores de plazuela que velan por nosotros, para escarnio de la democracia, a la que tanto debemos y tanto bien nos hace. Viva la vida, Cisneros. Viva la vida, en las varias lenguas de este país triste y hermoso. Viva la vida, Perú. ¡Pero nos pedirán cuentas!

1 comentario:

  1. Esta columna fue publicada en el diario El Observador el 31 de diciembre de 1981, en el advenimiento del año 1982.

    ECH

    ResponderEliminar